EL CUERPO DEL DOLOR:
Ella parte dejando al deseo culpable del camino.
Ella parte de la peregrinación de mi centro vital, a buscar otro,
a vivir en espacio afín, lejos de mis pisadas,
tomando el olvido posible de realidad.
Ella se integra dejando mi virtuosidad intacta,
Y mi alma innata por culparla.
TODO ES UNA DIMENSION SIN SU TIEMPO:
Mi provocación encuentra al contacto de una sóla vez.
Su apaciguar de figura enseña que no es pareja la pelea,
que sólo la razón de ser , está en el bienestar,
de las cosas que pasan y nos emocionan,
de las cosas que pasan y se repiten
de la raiz del propio pensamiento-acción,
al embestirlos cúal verdad.
HACER PROPIAS LAS FORMAS:
La integridad se solidifica,
No hay culpables de ser propios
Sólo formas de ocupar las vías al respirar.
No hay culpables.
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